Un trabajo de…

Esta es la trama de “El hombre que pudo reinar”, una novela corta escrita por el genial Rudyard Kipling en 1888. Kipling se inspiró en las historias reales de James Brooke, el primer rajá blanco de Borneo, y de Josiah Harlan, un aventurero americano que se hizo con el título de Príncipe de Ghor. Con su estilo magistral, Kipling nos transporta a un escenario fascinante, lleno de color, exotismo y peligros. Su obra es considerada una de las mejores de su producción literaria, y ha sido llevada al cine por el gran John Huston, con Sean Connery y Michael Caine como protagonistas, y Christopher Plummer como el propio Kipling. Además, esta edición cuenta con las magníficas ilustraciones de Fernando Vicente, que recrean con maestría el ambiente y los personajes de esta increíble historia.

La época en que se sitúa “El hombre que pudo reinar” es aquella en la que el Imperio Británico dominaba el sur de Asia con mano de hierro, pero también se enfrenta a rebeliones, guerras y rivalidades. Una época en la que algunos británicos soñaban con hacerse ricos y famosos en las tierras exóticas de Oriente, sin importarles el precio que tuvieran que pagar.

Y el lugar es Kafiristán, una región oculta en las montañas del Hindu Kush, en el actual Afganistán, formada por los valles de los ríos Alingar, Pech, Landai Sin y Kunar, y las montañas que los rodean. Es una zona de difícil acceso, con un clima frío y una gran diversidad étnica y cultural. Los habitantes de Kafiristán practicaban una religión politeísta basada en la adoración de la naturaleza y de los antepasados, y una sociedad tribal, con una fuerte tradición guerrera y artística. Allí, los nativos los reciben como dioses y les rinden culto, pero también les pondrán a prueba con sus costumbres, creencias y conflictos.

¿Los protagonistas de “El hombre que pudo reinar,” son los siguientes:

Daniel Dravot, el líder de la expedición. Es un hombre audaz, inteligente y carismático, que consigue conquistar a los nativos con su valor y su astucia. Pero también es un hombre soberbio, ambicioso y temerario, que se cree descendiente de Alejandro Magno y quiere casarse con una princesa local. Su destino será trágico y simbólico.

Peachy Carnehan, el compañero de Dravot. Es más cauto, sensato y realista que su amigo, y trata de hacerle ver que deben abandonar Kafiristán con el botín que han logrado. Pero también se deja llevar por el poder y la riqueza, y no puede evitar la caída de Dravot. Es el único superviviente de la aventura, pero queda marcado y enloquecido por lo que ha vivido.

Rudyard Kipling, el narrador y testigo de la historia. Es un escritor y periodista británico que trabaja en la India. Conoce a Dravot y Carnehan en un tren, donde le cuentan su plan de conquistar Kafiristán. Les regala un colgante masónico, que será clave para su ascenso y su caída. Años después, recibe la visita de Carnehan, que le cuenta lo ocurrido en Kafiristán y le devuelve el colgante con la cabeza momificada de Dravot.

Billy Fish, el guía y traductor de los dos aventureros. Es un gurkha que sobrevivió a una masacre de los nativos a un destacamento militar británico. Habla inglés y varios idiomas locales, y ayuda a Dravot y Carnehan a comunicarse con las tribus de Kafiristán. Es leal, valiente y honrado, y muere defendiendo a sus amigos.

Roxana, la princesa local que es elegida como esposa para Dravot. Es una joven hermosa e inocente, pero también temerosa y reacia a casarse con un extranjero. Cuando Dravot intenta besarla, ella le muerde y le hace sangrar, revelando así que no es un dios sino un hombre mortal. Esto desencadena la rebelión de los nativos contra Dravot y Carnehan.

“El hombre que pudo reinar” es una novela con un fuerte trasfondo masónico. Su autor, Rudyard Kipling, era un masón que plasmó en su obra sus creencias y valores. Te contamos algunos detalles interesantes sobre esta relación:

Kipling se inició en la masonería en 1886, en la Logia Hope and Perseverance Nº 782 de Lahore, India. Allí conoció a muchos amigos y compañeros que le inspiraron para escribir sus cuentos y poemas sobre la India y el Imperio Británico. En sus obras se pueden encontrar muchas referencias y símbolos masónicos, como el compás, la escuadra, el ojo o la estrella de cinco puntas.

La novela está dedicada a su hermano masón, el coronel Jameson, que participó en un intento de golpe de estado contra el gobierno de Transvaal en 1895. Kipling admiraba su espíritu aventurero y le dedicó estas palabras: “A Brother Hold Fast, este libro es dedicado por Brother Square Toes, con la esperanza de que le guste tanto como a él le gustó hacerlo”. Estos apodos son términos masónicos que aluden a la fidelidad y la rectitud.

La historia narra las aventuras de dos británicos que viajan a Kafiristán con el propósito de convertirse en reyes. Su ascenso al poder se debe en gran parte a que son reconocidos como masones por los nativos, que les consideran descendientes de Alejandro Magno y dioses vivientes. El colgante masónico que les regala Kipling es el símbolo que les abre las puertas del reino, y también el que sella su destino cuando lo pierden.

Los valores que refleja la novela son los ideales masónicos, como la fraternidad, la solidaridad, la tolerancia, la búsqueda de la verdad y la libertad. Los dos protagonistas son amigos inseparables que se apoyan mutuamente en las adversidades. También respetan y protegen a los nativos, a los que tratan de civilizar y educar. Sin embargo, también muestran los defectos y vicios humanos, como la ambición, el orgullo, la codicia y la traición, que les llevan a su perdición.

Pero además de lo anteriormente dicho, “El hombre que pudo reinar”, incluye algunos otros temas como:

La amistad y la lealtad: Dravot y Carnehan son amigos inseparables que se apoyan mutuamente en las adversidades. También se hacen amigos de Billy Fish, un gurkha que les sirve de intérprete y guía. La novela nos muestra la importancia de la fraternidad, la solidaridad y el sacrificio entre los compañeros de aventuras.

La religión y la superstición: Dravot y Carnehan se aprovechan de la credulidad de los nativos, que les consideran dioses descendientes de Alejandro Magno. El colgante masónico que les regala Kipling es el símbolo que les abre las puertas del reino, y también el que sella su destino cuando lo pierden. La novela nos muestra el choque cultural y religioso entre los colonizadores y los colonizados, así como las consecuencias de la blasfemia y la profanación.

La aventura y el misterio: Dravot y Carnehan viajan por territorios hostiles y desconocidos, donde se enfrentan a tribus guerreras, animales salvajes, ritos ancestrales y paisajes impresionantes. La novela nos recrea un mundo fantástico y exótico, lleno de peligros, sorpresas y maravillas. La novela se inspira en hechos y personajes reales, como James Brooke, Josiah Harlan y el Gran Juego.

En resumen, esta novela es una obra maestra de la literatura, que combina la crítica social, la ficción histórica y la aventura fantástica. Nos muestra los efectos del imperialismo británico en la India y en otras regiones de Asia, así como los límites de la ambición humana y el poder. Al mismo tiempo, nos hace reflexionar sobre el valor de la amistad, la lealtad, la tolerancia y la libertad, pero también sobre los defectos y vicios humanos, como la codicia, el orgullo, la traición y la blasfemia. La novela nos transporta a un mundo exótico y misterioso, lleno de peligros, sorpresas y maravillas, que nos cautiva y nos emociona.