El estilo empleado por Bret Easton Ellis en American Psycho
se puede describir como realismo sucio, ficción transgresiva y sátira. El realismo sucio es un movimiento literario que se caracteriza por retratar la vida cotidiana de personajes marginales,
alienados o desencantados, con un lenguaje crudo, coloquial y sin adornos. Ellis muestra el lado más oscuro y depravado de la sociedad estadounidense de los años ochenta, con escenas de violencia,
sexo, drogas y consumismo desenfrenado. La ficción transgresiva se basa en la exploración de temas tabú, polémicos o provocadores, como el crimen, el sadismo, el nihilismo o el deseo. Ellis rompe las
normas morales y estéticas al narrar los actos atroces y aberrantes de su protagonista, Patrick Bateman, un asesino en serie que disfruta torturando y matando a sus víctimas. Y la sátira es una
técnica literaria que consiste en criticar, ridiculizar o denunciar a una persona, una institución o una idea, mediante el uso del humor, la ironía o la exageración. Ellis utiliza la sátira para
cuestionar los valores y el estilo de vida de la élite financiera y social de Nueva York, que se muestra como superficial, vacía y corrupta.
La violencia en American Psycho tiene un papel fundamental,
tanto en el nivel narrativo como en el nivel temático. En el nivel narrativo, la violencia es el motor de la acción y el elemento que genera tensión, suspense e intriga. Los crímenes de Patrick
Bateman son descritos con un realismo extremo y un detalle minucioso, lo que provoca una fuerte impresión en el lector o el espectador. La violencia también sirve para contrastar la doble vida del
protagonista, que pasa de ser un ejecutivo exitoso y refinado a ser un monstruo sanguinario y depravado. En el nivel temático, la violencia es una forma de expresar la crítica social y la sátira que
plantea la obra. La violencia de Patrick Bateman es el reflejo de la violencia del sistema capitalista, que fomenta el individualismo, el consumismo, la competitividad y la deshumanización. Bateman
es un producto de una sociedad enferma, que no le ofrece ningún sentido ni propósito a su existencia, y que le hace sentir vacío, aburrido y alienado. La violencia es su única forma de escapar de la
monotonía, de sentir algo, de afirmar su identidad y de rebelarse contra las normas establecidas. La violencia en American Psycho también tiene un papel estético y provocador. La obra busca romper
los límites del género literario y cinematográfico, al mezclar elementos del thriller, del humor negro, del drama psicológico y del terror. La novela también busca generar una reacción en el público,
al mostrar escenas que pueden resultar chocantes, repulsivas o inmorales, al mismo tiempo que pretende cuestionar los valores y las convenciones de la cultura dominante, al exponer su hipocresía, su
corrupción y su decadencia.