EN EL CAMINO

Nº 25. Temporada 3ª. Abril 2013

A cada paso se apagan,

a cada paso se encienden,

se dejan las puertas abiertas

que el tiempo cerrará.

Llega el cansancio.

Nada es igual y nada diferente,

es como lo recuerdas,

pero todo camina aunque no quieras.

Se posee los recuerdos,

lo demás, tormentas de verano:

marcan el paisaje

con surcos profundos por donde el agua corre.

Hay que seguir el camino

donde se trazan las metas

y, al final, ser simplemente,

                                           ser.                                         

 

Ancrugon

 

Caminante no hay camino...

 

Al proponer el tema, que lleva por título: “El camino”, se me vino a la memoria el poeta eterno que quizá lo ha utilizado con más frecuencia en su simbología poética, Antonio Machado, para quien este concepto representaba la vida en su transcurso, en su pleno devenir, la vida como un .. 

Camino. Pensamientos.

 

El camino es una imagen bastante recurrente sobre la vida y una metáfora muy asistida a propósito de nuestro paso por ella y, claro como el agua en cuenco repleto de lluvia, un elemento bastante socorrido para poetas, soñadores y pensadores en general quienes supieron expresar con ello lo que para el vocabulario resultaba inefable...

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El niño sin nombre, de Travis.

 

Hoy he rebuscado por discografía en la caza de esos grupos de música "indi" que tanto me gustan, lo descubro, y me he dado de narices con un joyita de hace unos años obra de unos chavales escoceses que realmente hacían unas interpretaciones deliciosas. Me refiero a Fran Healy, quien pone la voz...

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Palabras de mala prensa

Amor y equilibrio

María Elena Picó Cruzans – Abril 2013

 

 

El Tercer Orden del Amor es el Equilibrio. Y nos conecta con el flujo de energía.

 

 

“Jacob salió de Berseba con dirección a Jarán. Llegó a cierto lugar y se dispuso a pasar allí la noche, porque el sol ya se había puesto. Tomó una piedra, la puso por cabecera y se acostó.

         Tuvo un sueño. Veía una escalera que, apoyándose en la tierra, tocaba con su cima el cielo, y por la que subían y bajaban los ángeles del Señor”

Génesis, 28, 10-12

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Créeme, estoy mintiendo

Capítulo 6 Javi ¿pero qué?

Ángeles Sánchez – Abril 2013

 

 

Suena el despertador, hora de empezar otro día gris de trabajo en el Gran Núcleo, otro día más. Me visto con mi uniforme, aún recuerdo como los aborrecía Angy. Recuerdo que siempre decía: "No sé en qué pensaban los que lo diseñaron, porque son realmente feos e incómodos". Mi pequeña inconformista, Angy. La chica que odiaba todo lo que le rodeaba, todo lo que estaba a su alrededor, ya fuese malo o bueno. Odiosa como ella sola, Angy. Y ahora, ahora ya no está. Desaparecida durante meses ¿muerta? La última vez que la vi fue saliendo de mi cama, y no me comporté muy bien con ella. El mismo día que Mario apareció en el Gran Núcleo entre las filas de los milicianos. Ya no está...

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Érase una vez

El milagro secreto, de Borges

Melquíades Walker – Abril 2013

 

 

Borges es el escritor de cuentos por excelencia. Cuando alguien le reprochaba el hecho de que jamás escribiera una novela, él les respondía que prefería escribir cuentos porque éste era un género esencial y directo, no así la novela que necesitaba del relleno para hacerla más extensa, y ponía como ejemplo a aquellos narradores que habían tocado los dos géneros, de los cuales decía que eran mejores sus cuentos que sus novelas, pues para él era una pérdida de tiempo y energía exponer en quinientas páginas aquello que podía ser dicho en pocos minutos…

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El diario de Ana

Esos momentos

Ana L.C.– Abril 2013

 

 

El funeral de don Fulgencio fue algo desolador. Yo no conocía demasiado al hombre, pero jamás habría pensado que una persona tan activa, notoria e influyente como él, por lo menos dentro del limitado círculo de aquella pequeña ciudad, provocase tan pocas voluntades de acompañarle en su último adiós por este mundo. Del bufete tampoco fuimos la totalidad, pues las cosas no estaban como para ir cerrando puertas, ni tan siquiera en el funeral de la persona que lo había dirigido durante más tres décadas. Simplemente estábamos las cabezas más representativas, como Vicente, el Jefe de Administración, Carlos y Miguel, dos de los asociados con más peso, Araceli, mi secretaria, y yo. Faltaba Matilde, otra de las asociadas que estuvo de agregada al equipo del Presidente hasta la llegada de su esposa, Lucía, la cual, parece ser, tomó con bastante aplomo y decisión las riendas.

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Temas e ideas

Mi primer tren

Ancrugon – Abril 2013

 

 

Mi padre, como tantos otros españoles en la década de los sesenta, viajo más allá de los Pirineos en busca de un trabajo que en su tierra no hallaba. Él lo encontró en el sur de Francia y en aquello que mejor sabía hacer: el campo. Allí estuvo un tiempo separado de su familia, mientras nosotros, en nuestro pueblo lleno de luz mediterránea, esperábamos sus cartas y su dinero. Mi recuerdo de aquella época no es el de una ausencia, no, pues mi madre se encargaba diariamente de hacer real la presencia del padre, contándonos los cuentos que él siempre nos contaba, relatándonos anécdotas que le ocurrieron a él en su juventud, creando una lista de castigos o premios que se le comunicarían a su regreso, escribiéndole unas largas cartas semanales que, con escasas variaciones, eran siempre iguales, pidiendo por él en nuestras oraciones de cada noche, e, incluso, buscando en la radio emisoras francesas que no entendíamos pero que tenían la facultad de acercarnos un poco más.

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jUGUETES

sUSURROS

Wendy – Abril 2013

 

 

La primera vez que la vio al doblar la esquina, tuvo la desagradable sensación de que un dedo frío le recorría la espalda. Era una casa antigua, enorme y con unos grandes balcones de hierros retorcidos en su fachada gris en cuyas puertas se abrían grandes ojos oscuros en las partes donde se habían roto los cristales. María se volvió para mirar a su padre y a su hermana, sólo ésta le devolvió la mirada y por ello supo que estaba tan desilusionada como ella.

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Los clásicos divertidos

Cuatro corazones con freno y marcha atrás

Ancrugon – Abril 2013

 

 

Los caminos de la creación son inescrutables. Nadie, absolutamente nadie, puede asegurar a ciencia cierta cuál será el momento en que la inspiración se fijará en su persona para dotarle de esa gracia divina con la que realizar una obra de arte, pero tampoco puede asegurar ni dónde, ni cómo, ni de qué forma… A veces, todo es cuestión del azar… Pongamos un ejemplo: Supongamos que corría el año 1934. Imaginemos a un empresario neoyorquino, de teatro, claro está, que pretende poner en los escenarios norteamericanos algo surgido de la genialidad y la casta hispana, sugiramos que este señor se llamara Chappell, ¿por qué no?, y para tal evento le encarga dos obras, un dramática y otra cómica, a un dramaturgo español de moda en aquella época, el cual podría ostentar el nombre de Gregorio Martínez Sierra, de peores se han visto ¿no?, y que tal señor, bien por el cansancio de la edad o porque no estaba de humor o porque no le salían demasiado bien las comedias, decide aceptar el encargo de la obra trágica y le pasa el marrón de la segunda a otro escritor, que por entonces estaba abriéndose caminos por la fama, a quien le bautizaremos como Enrique. Éste, que no estaba precisamente pasando por su mejor época económica, acepta el reto gustosamente. Así que comienza a revolver entre sus papelotes y encuentra un acto que había escrito ocho años atrás, pero que luego dejó abandonado en el sueño de los justos, así que rescató este material y se estrujó un poco la materia gris hasta dar con una sinopsis de un pieza teatral completa, la cual fue aceptada por el empresario yanqui, pero con la condición de que estuviera concluida en el plazo de seis semanas… sin embargo se olvido de enviarle el anticipo pecuniario prometido, por lo que nuestro amigo Enrique, a quien la obra no le interesaba demasiado y sí el dinero, decidió abandonar y la dejó inconclusa.

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Mis amigos los libros

El camino, de Miguel Delibes

Ancrugon – Abril 2013

 

 

(…)

Después del Evangelio, don José, el cura, que era un gran santo, subió al púlpito y empezó el sermón. Se oyó un carraspeo prolongado en los bancos de los hombres e instintivamente Daniel, el Mochuelo, comenzó a contar las veces que don José, el cura, decía "en realidad". Aunque él no jugaba a pares o nones. Pero don José decía aquella mañana cosas tan bonitas, que el Mochuelo perdió la cuenta.

—Hijos, en realidad, todos tenemos un camino marcado en la vida. Debemos seguir siempre nuestro camino, sin renegar de él —decía don José—. Algunos pensaréis que eso es bien fácil, pero, en realidad, no es así. A veces el camino que nos señala el Señor es áspero y duro. En realidad eso no quiere decir que ése no sea nuestro camino. Dios dijo: "Tomad la cruz y seguidme.

>Una cosa os puedo asegurar —continuó—. El camino del Señor no está en esconderse en la espesura al anochecer los jóvenes y las jóvenes. En realidad, tampoco está en la taberna, donde otros van a buscarlo los sábados y los domingos; ni siquiera está en cavar las patatas o afeitar los maizales durante los días festivos. Dios mismo, en realidad, creó el mundo en seis días y al séptimo descansó. Y era Dios. Y como Dios que era, en realidad, no estaba cansado. Y, sin embargo, descansó. Descansó para enseñarnos a los hombres que el domingo había que descansar".

Don José, el cura, hablaba aquel día, sin duda, inspirado por la Virgen, y hablaba suavemente, sin estridencias. Prosiguió diciendo cosas del camino de cada uno, y luego pasó a considerar la infelicidad que en ocasiones traía el apartarse del camino marcado por el Señor por ambición o sensualidad. Dijo cosas inextricables y confusas para Daniel. Algo así como que un mendigo podía ser más feliz sin saber cada día si tendría algo que llevarse a la boca, que un rico en un suntuoso palacio lleno de mármoles y criados. "Algunos —dijo— por ambición, pierden la parte de felicidad que dios les tenía asignada en un camino más sencillo. La felicidad — concluyó— no está, en realidad, en lo más alto, en lo más grande, en lo más apetitoso, en lo más excelso; está en acomodar nuestros pasos al camino que el Señor nos ha señalado en la Tierra. Aunque sea humilde".

(,,,)

“El camino”. Cap. XVII (fragmento)

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Personajes de papel

Historia del cómic - prehistoria

Fe.Li.Pe. – Abril 2013

 

 

La necesidad del ser humano de expresarse viene desde el primer momento que tuvo conciencia de sí mismo y de sus necesidades, desde las más concretas hasta las más abstractas, así como de lo indefenso que estaba frente a los elementos cuyo dominio escapaba a sus fuerzas. Y uno de los medios más socorridos que tenía a mano, hasta que se inventó la escritura, era el dibujo y, de esta forma, desde la misma infancia de la especie, los humanos garabatearon paredes y objetos con sus más o menos toscas representaciones de la realidad.

Por ello, se podría afirmar que los primeras muestras de lo que luego llegará a denominarse cómic, o tebeo, nacieron en las mismas cuevas rupestres donde nuestros antepasados prehistóricos pintarrajeaban animales, personas o escenas que representaban sus acciones cotidianas o los alimentos que les mantenían con vida. Según dicen los expertos, estas representaciones poseían una cierta finalidad mágica o religiosa, como la de favorecer la caza o la resolución de alguna batalla o el hecho de favorecer la fecundidad… pero todo son especulaciones, pues nadie quedó de aquellos para que lo pudiera contar y, posiblemente, tan válido sería decir que lo único que pretendían era pasar el rato…

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eFEMÉRIDES

Ocurrió en abril Concurso 3

Luis Antonio Novella – Abril 2013

 

 

“EL QUE LEE MUCHO Y ANDA MUCHO, VE MUCHO Y SABE MUCHO”

Miguel de Cervantes

 

Este mes he escogido a siete escritores nacidos en el mes de abril, de los cuales he aprendido algunas cosas que desconocía. Espero que os lo paséis tan bien buscando las respuestas, como yo lo he hecho preparando las preguntas.

 

HANS CHRISTIAN ANDERSEN , nacido el 2 de abril de 1805 en Odense, Dinamarca.

GABRIELA MISTRAL, nació en Vicuña, el 7 de abril de 1989.

CORIN TELLADO, nació el 25 de abril de 1927 en El Franco, Asturias

VLADIMIR NAVOKOV, nació en San Petersburgo el 22 de abril de 1899

WILLIAN SHAKESPEARE, fue bautizado el 26 de abril de 1564, en Stratford, (Reino Unido)

VICENTE ALEIXANDRE, nació en Sevilla el 26 de abril de 1898.

CHRISTIAN JACQ, nació el 28 de abril de 1947 en Paris (Francia).

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El perfil del pentagrama

Slowhand

Eva Sion – Abril 2013

 

 

 “¿Cómo se lo tomará mi madre?” – Fue lo primero que podría haber pensado Pat cuando tuvo la confirmación de su embarazo. Con sólo dieciséis años y enamorada de un soldado canadiense, Edward, destinado en el Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial, ¡y encima casado en su país!, la cosa no parecía tener mucho futuro... Y así fue, pues el galán le dejó muy claro que no quería saber nada del niño y lo confirmó con su marcha a su Canadá natal en cuanto pudo, antes incluso de que naciera…

Pat estaba destrozada, sola y llena de miedo. ¿Qué diría su madre?... (creo que esto ya lo he dicho)… ¿y su padrastro?... Sí, porque encima, su padre, un tal Reginald quien tenía fama de ser un buen pianista que tocaba con algunas bandas por los garitos de Surrey, no estaba a su lado, ya que su madre, Rose, se había vuelto a casar con otro hombre, un tipo llamado Jack, el cual siempre la trató con consideración y cariño paternal, pero ahora… ahora les había fallado y seguro que se sentirían decepcionados. Sin embargo Pat pronto pudo descubrir que por encima de todo puede más el amor… (Esto me ha quedado algo cursi, pero es cierto). Ellos se hicieron cargo de todo y así, cuando Eric nació, los abuelos cuidaron de él como si fueran sus verdaderos padres y, aunque nunca le adoptaron, pues llevó el apellido de su madre y de su abuelo materno, Clapton, sí que fueron sus tutores legales hasta que cumplió los dieciocho años. Más adelante Pat contrajo matrimonio con otro piloto canadiense, Frank, se nota que le iban las alturas, y se marchó con este nuevo mozo a las Américas dejando al pequeño Eric con sus abuelos.

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